Crónica de una mala noche anunciada

Despertando un sábado del mes de septiembre iniciando un nuevo día con todas las ganas de llegar a la provincia de Barahona, era el día donde se daría inicio a un curso taller que por varios años había esperado. decía dentro de mi ¡por fin mi sueño se hará realidad! Al llegar al lugar donde me reuniría con unos colegas para luego salir en busca de un hotel en cual alojarnos, sabíamos de antemano que las clases iniciaban a las 9:00am y terminarían a las 6:00pm.

Sin pensarlo dos veces salimos en busca del Hotel en el cual pasaríamos la noche, nos montamos en 2 moto concho, esas personas corrían tan rápido que parecía una competencia ¡el que llegue primero gana! Llegamos a un hotel y preguntamos si tenían habitaciones disponibles, la chica me mira con cara de tristeza y me dice:

lo siento atleta ya no tengo habitaciones disponibles, nos miramos todos con la cara de idiota, ahora sí uno mas que esta lleno, empezamos a caminar sin esperanza mirando para un lado y para el otro como cuando alguien anda perdido y no tiene rumbo, por desgracia o para buena suerte unos de los colegas vio un letrero casi borrado que decía Hotel, nos convertimos en Feliz Sánchez aligeramos los pasos hacia el hotel, allí nos llevamos una gran sarpresa, el Gerente era mas despistado que el pajaro loco.

la recepcioncita era haitiana y casi no hablaba español, iniciaron las negociaciones y el gerente enseguida dijo hay habitaciones, mi corazón se alegro al ritmo de los demás, salimos con un canto de victoria, ya son las 12:00pm empezamos a sentir un vacío en el estomago definido como hambre, ósea la ausencia de alimentos en el estomago, entre doblar de esquina un letrero ilumina nuestros ojos decía Pica poyo Chino , entramos al negocio y pedimos los servicios allí nos encontramos con unos tipos raros uno se parecía a bruse li y otro a jet li, hablaban raro no entendíamos nada y una niñita que se la pasaba de un lado para el otro, comimos hasta saciarnos nos dirigimos a la calle y tomas 2 moto conchos que parecían corredores de formula I.

llegamos al lugar de encuentro y tomamos las clases, hora de partida un abogado medio loco tenia un carro, nos dice que nos dará una bola hasta el hotel, en el camino uno de los colega recuerda que tiene que cambiar un CK, el banco ya esta cerrado, el abogado dice que conoce una casa de cambio y que nos llevara al lugar, cuando llegamos a la llamada casa de cambio era un colmado el colmadero medio chivo y el abogado dándole muela acepta cambiar el CK, pero con una duda entre ceja y ceja le pide al titular del CK la cédula el colega sin ningún problema procese y de la entrega, el colmadero mira la foto de la cedula y mira al colega, noté que el colmadero estaba sospechoso el colega el la foto tiene cabello y en la realidad lo ve medio calvo, entre mira la foto y mira al colega se ve la expresión de duda y decide pedir un numero telefónico para contactar en caso de que se tratara de un CK pinpon, por fin se decide cambia el CK y nos vamos, cuando llegamos al hotel si así se puede llamar, el gerente desaparece, solo nos quedamos con la recepcionista que para el colmo no sabe hablar bien español, pero machacando entre idioma un colega logro entenderla, decidimos checar las habitaciones, para mi sorpresa las puertas no tenían cerradura, solo tenían un candado globe negro la llave amarrada con hilo de saco y el llavero era un pedacito de madera cortada, y para el colmo por poco se cae cuando intente abrirla, la camas chillaban mas que una mecedora vieja prefería mil veces la dureza del piso que la dureza de esas camas, las sabanas rotas y mal lavadas, gracias a Dios yo lleve la mía, cuando probamos ver si había agua nada ni polvo salio de la llave por que no era ducha, nos miramos todos con cara de espanto no soporte y le dije en todo sarcástico esto es la crónica de una mala noche anunciada, no nos quedo mas que aceptar nuestra situación y adaptarnos a las condiciones del lugar. Son las 7:00pm decidimos salir a cenar, para olvidar lo que nos esperaba a la hora de dormir.

Regresamos al hotel el caso es mas grande no se encuentra la recepcionista encontramos a un señor de unos 50 años de edad que es el encargado de cobrar y vigilar el área, se presenta de la siguiente manera “yo soy el que cobra” que cosa esta!! le pregunto por el agua y me dice dentro de un rato prendo la bomba, espero el famoso rato y pasa una hora, vuelvo y le digo ¿señor y el agua? Ahhhhhhhhh ya la pongo, 10 minutos después escucho una persona que dice me ahogoooooooooooooooooo!!!, el agua se metía a las habitaciones y los calzados andaban flotando como si fuera un río, no se de donde aparecio el señor con una cubeta para sacar el agua, yo para votar el golpe le dije, señor recuerde traer salva vidas, se convirtió en un guardián de la bahía, bueno, ya son las casi las 11:00pm. Quiero dormir un rato pero no se si lo lograre…
continuará...